Una de las promesas de campaña del presidente Donald Trump es que las empresas estadounidenses contraten a más estadounidenses en lugar de externalizar trabajos a países con mano de obra más barata o traer a empleados extranjeros peor pagados. Esta promesa incluye medidas enérgicas contra un programa de visados de trabajo que permite a miles de empleados extranjeros cualificados trabajar en «ocupaciones especializadas» en todo Estados Unidos, especialmente en la industria tecnológica.
Este mes, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS) ha dificultado a las empresas estadounidenses la contratación y entrada en el país de trabajadores tecnológicos extranjeros mediante el visado de trabajo H-1B. La agencia gubernamental estableció nuevas medidas para combatir lo que considera «fraude y abuso» en el programa. El Departamento de Justicia (DOJ) también advirtió a los empresarios que soliciten los visados que no discriminen a los trabajadores nacidos en Estados Unidos.
Las mayores empresas tecnológicas de Silicon Valley, muchas de las cuales fueron fundadas o dirigidas por inmigrantes, dependen en gran medida de los trabajadores H-1B. También afirman que los esfuerzos de la Casa Blanca por introducir cambios en el sistema de inmigración amenazan la innovación, la formación de nuevas empresas y la contratación.
Sin embargo, las empresas de subcontratación, como muchas del sector tecnológico, se consideran las que más abusan del sistema. El anuncio del USCIS va dirigido a esas empresas, y la agencia gubernamental afirma que centrará las inspecciones en los centros de trabajo con mayor porcentaje de trabajadores H-1B y en aquellos cuyos empleadores realicen trabajos informáticos para otras empresas.
Además, las nuevas directrices exigen información adicional a los programadores informáticos que soliciten visados H-1B para demostrar que los trabajos son complejos y requieren conocimientos y experiencia más avanzados. Entra en vigor inmediatamente, por lo que cambiará la forma en que las empresas solicitan los visados en un proceso de lotería anual.
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